La segunda jornada de debate en el Congreso volvió a estar marcada por la represión de las fuerzas de seguridad en las inmediaciones del Palacio Legislativo.
Decenas de miles de personas se reunieron hoy frente al Congreso para acompañar el debate y decirle no a la Ley Ómnibus que impulsa el gobierno de Milei.
Pese a la brutal orden de represión que esgrimieron las fuerzas bajo las órdenes de Patricia Bullrich, la mayoría de los presentes, pertenecientes a organizaciones de autoconvocados, movimientos sociales, políticos, jubilados y «sueltos», mantuvieron una conducta pacífica, entonando cánticos y repitiendo la consigna «La Patria No Se Vende».
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