En una tarde decisiva en Mar del Plata, el Tiburón venció 3-1 a Independiente Rivadavia y salió del descenso. Pero el partido quedará en la historia por el taco magistral de Giani, una asistencia de lujo para el gol de Cervera que encendió el Minella.
Por Ignacio Elfratini para Noticias La Insuperable

Hay finales que no entregan copas, pero sí vidas deportivas. Aldosivi jugó una de esas en el José María Minella y la ganó con autoridad: 3-1 sobre Independiente Rivadavia, tres puntos vitales para escapar del fondo, y una jugada que ya tiene lugar reservado entre las mejores del torneo. El taco de Giani para asistir a Cervera en el tercer gol fue pura poesía futbolera.
El Tiburón salió a devorar desde el arranque
El equipo de Guillermo Farré mostró hambre desde el primer minuto. Apenas empezó el partido, Aldosivi se fue encima de la Lepra, lo acorraló y encontró premio rápido: centro perfecto de Cerato desde la derecha y Giani, anticipando a todos, cabeceó al 1-0. Ni el despeje en la línea de Peinipil alcanzó para frenar la marea verde y amarilla.
El dominio inicial del local marcó el tono del juego. Aunque el conjunto de Alfredo Berti respondió con peligro —Sartori tuvo el empate de cabeza antes del entretiempo—, el Tiburón impuso su ritmo y su necesidad.
Otro cabezazo, otra daga
La segunda parte empezó como un espejo de la primera: tiro libre frontal de Serrago, Mottes la bajó al medio y Palavecino apareció de frente para clavar el 2-0 de cabeza. El Minella rugía. Pero lo mejor todavía estaba por venir.
El taco de Giani: una joya para la eternidad
A los 70 minutos, cuando la Lepra intentaba reaccionar, llegó la jugada que todos comentan. Giani recibió de espaldas, giró un instante, y con una lectura exquisita metió un pase de taco que dejó solo a Cervera. El delantero definió cruzado, seco, al palo izquierdo: 3-0 y locura en Mar del Plata.
La asistencia de Giani fue una mezcla de inspiración, técnica y atrevimiento. Un gesto que rompió el partido y desató el festejo. En redes sociales, la jugada se viralizó en minutos: un taco que representa lo mejor del fútbol argentino cuando aparece la magia en medio del sufrimiento.
Descuento y resistencia
Independiente Rivadavia descontó gracias a Alex Arce, tras un buen centro de Bergara, y luego tuvo otro gol anulado por offside tras revisión del VAR. Berti movió el banco y mandó a la cancha a varios titulares, incluido Sebastián Villa, pero el empuje mendocino no alcanzó.
En Mar del Plata, una final ganada
El pitazo final fue liberador. Aldosivi dejó la zona de descenso (al menos hasta que juegue San Martín) y celebró con su gente una victoria que vale más que tres puntos.
Guillermo Farré lo dijo todo con su gesto al final: puño apretado, mirada al cielo, y una sonrisa de quien sabe que su equipo volvió a creer.
Porque sí, esta vez la gloria no fue un título. Fue un taco, un gol y un grito que hizo temblar el Minella.
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