Biden: la «sarasa» del petróleo ruso y la excusa perfecta para ingresar a Venezuela

Cuánto hay de verdad en el «impacto económico» que vende Biden y qué se esconde detrás.

Por Roque Pérez para Noticias La Insuperable

Estados Unidos sabe bien de la diferencia que existe entre lo que se dice y lo que realmente significa lo dicho. Por eso no es de extrañar que las palabras del presidente Joe Biden en lo que respecta a las sanciones económicas en la compra de recursos energéticos a Rusia sea más un bluf para la prensa y los enfervorizados seguidores, o un mensaje para los dirigentes tercermundistas «más yankees que los yankees» (que de esos sobran en Argentina) que una realidad.

Es claro que Biden jamás correría el riesgo de hacer nada que pudiera perjudicar ni un ápice a la economía de su país.

La verdad de los números

En 2021, Estados Unidos realizó compras de petróleo y gas al mundo entero por un valor de 145.487 millones de dólares, de los cuales solo 4.714 millones de dólares correspondieron a importaciones provenientes de Rusia, indica una investigación de «El Financiero» de México, basada en los datos de la Oficina del Censo estadounidense.

La cuenta es fácil: el petróleo y el gas que van de Rusia para EEUU apenas representaron el 3.24 por ciento de lo comprado.

Es más, de todo lo que Estados Unidos le compra al gigante ruso, el gas y el petróleo sólo representaron poco más la cuarta parte de los 17.538 millones de dólares que los rusos mandaron para norteamérica.

«Estamos prohibiendo todas las importaciones de petróleo, gas y energía rusos. Eso significa que el petróleo ruso ya no será aceptable en los puertos de EEUU y el pueblo estadounidense dará otro poderoso golpe a la máquina de guerra de Putin«, dijo el mandatario.

Durante todo el 2021, Rusia exportó a todo el mundo por un total de 493.300 millones de dólares, con lo cual, «el poderoso golpe» que le da Joe Biden es el 0.95% del total de lo que la ex economía soviética entrega en el planeta.

Todo sea por el crudo venezolano

La movida de Biden solo significa así una «excusa perfecta» del gobierno estadounidense para dar marcha atrás con su errática y desgastada política anti Venezuela (a la que intentó doblegar de muchas maneras sin conseguirlo) y acceder finalmente a los pozos de Maduro. Las conversaciones entre ambos países ya se habían iniciado el sábado previo al anuncio el Director de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental en la Casa Blanca, Juan González y el embajador Jimmy Story, se reunieron con el presidente venezolano para tantear su posible respuesta ante la oferta estadounidense de comprarle petróleo.

Y así, con el «sí» de Maduro en el bolsillo, Joe Biden realizó su «acting» ante las cámaras de televisión.

Y no solo Biden logra acordar con el hasta hace poco «diablo» sin inclinar la frente: el marketing del presidente estadounidense lo muestra como un triunfo del pueblo norteamericano para lograr la opresión del viejo enemigo soviético personalizado en Putín.

Así que, demostrado en números, lo del «poderoso golpe», solo fue pura «sarasa».

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s