
La séptima jornada del Campeonato Mundial de Ajedrez tuvo gran suspenso y todos los condimentos necesarios para mantener en vilo a la expectante afición.
Por Carolina Príncipe para Noticias la Insuperable ·
Con el ánimo retemplado tras el descanso, ambos jugadores volvieron pletóricos de audacia al ruedo singapurense. Gukesh, conduciendo las blancas, mostró desde la apertura sus intenciones de presionar al máximo en pos de la victoria. Liren no se amilanó ni eludió complicaciones, aceptó sin hesitar el sacrificio de peón del retador pero, después, a pura muñeca defensiva, debió sobrellevar –no sin estoicismo- una posición incómoda.

En el medio juego, cuando la amenaza del apuro de tiempo para Ding aparentaba ser insalvable, la complejidad de la posición invitaba al yerro. Como si no hubiese suficientes espadas de Damocles amenazando caer sobre los flancos, el actual campeón –sin resto para tomarse uno que otro minuto de reflexión- dejó su Dama en situación comprometida tras jugar 22 Dxa2.
Con un peón libre y amenazante, la pareja de alfiles y la Dama negra a merced del acoso, el bando blanco daba la impresión de estar a pocos movimientos de alcanzar una ventaja muy considerable. Y aún faltaban dieciocho para el control de tiempo.

Gukesh presionó lo suficiente hasta hacer realidad la superioridad que había buscado. Sin embargo, el terreno sobre el que se desarrollaba la partida seguía siendo resbaladizo.

Cuando las negras llevaron su Dama a d3 (ver siguiente diagrama) todo parecía indicar que con Ae3 la superioridad blanca iba a profundizarse. Gukesh no acertó y se inclinó por la menos hegemónica Df4. Liren, entonces, tuvo un respiro que le permitió capturar el caballo de c2 y forzar luego un cambio de Damas. Así la lucha continuó con 31 Axf6 Df5 32 Dxf5 gxf5 33 Axg7 Rxg7. Se abría el camino a un final con menos ventaja que la esperada para el retador.
Con el control de tiempo más próximo y asequible, Ding reelaboró su estrategia defensiva con precisión. Solo en la 40 –Re5- tuvo un traspié cuyos incómodos efectos no tardó en revertir. A partir de la 45 tomó las riendas del final y eludió una derrota que en varios momentos parecía inexorable.

El arte defensivo de Liren Ding, como hace un lustro -y también en Astaná-, volvió a brillar. El aspirante, siempre con voluntad de triunfo, sufrió un duro revés: dejó pasar la que quizá haya sido su mejor oportunidad hasta ahora para desequilibrar el match. A su favor puede esgrimirse que el chino viene demostrando que es mucho más talentoso de lo que sus detractores están dispuestos a reconocer.
Para algunos analistas de peso mediático, esta partida -que el sino ajedrecístico quiso que terminara en tablas- fue la más atractiva del duelo. Motivos no faltan para darle tal galardón: los protagonistas asumieron riesgos, confrontaron ideas estratégicas, brindaron un espectáculo nada frecuente en el alto nivel competitivo y trajinaron más de cinco horas de partida -72 movimientos- con los nervios de punta pero dando lo mejor de sí mismos. Y hasta soportaron media hora de conferencia de prensa sin perder la compostura.
Por estas y otras razones que tal vez se nos escapen, este día en Sentosa fue muy particular. Ding salvó la ropa y Gukesh, seguramente y a pesar de la frustración, no cejará en su voluntad de llegar victorioso a la meta. La segunda mitad de esta carrera largará mañana en la cálida tarde de Singapur.
FIDE 7a PARTIDA – GIF ANIMADO
Imágenes de la 7a partida: gentileza FIDE
Descubre más desde Noticias La Insuperable
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.


No tengo idea de cómo terminará el match, pero si esto es excusa para que en cada nota aparezca una foto de Sofía Loren los «Fellinianos» sentiremos que ha valido la pena… jeje.
Me gustaMe gusta
😊
Me gustaMe gusta