El S&P Merval se hunde casi un 5% este jueves 14 de agosto y marca su mayor baja en dólares desde abril, en medio de un fuerte nerviosismo financiero. El golpe llegó tras el traspié del Gobierno en la licitación del miércoles, donde Luis Caputo solo logró renovar el 61% de la deuda y debió convocar a una colocación de urgencia para el lunes 18 para frenar la presión sobre el dólar.
Celina Fraticiangi para Noticias La Insuperable
El derrumbe del mercado
La jornada bursátil arrancó en rojo, en sintonía con la mala performance de Wall Street. En el plano local, el S&P Merval se desploma 4,9% hasta los 2.175.778,39 puntos, mientras que medido en dólares el retroceso es del 5,6%, el más pronunciado desde el 4 de abril.
En el tablero, las mayores bajas dentro de las líderes son:
- Grupo Supervielle (-12,3%)
- Grupo Financiero Galicia (-6,4%)
- Telecom (-6,1%)
- Metrogas (-5,9%)
- Transener (-3,2%)
ADRs en caída libre
En Nueva York, las acciones argentinas tampoco encuentran respiro: los ADRs se hunden hasta 11,4%, con los bancos nuevamente en la mira. Supervielle y Galicia caen -5,7%, arrastrados por balances que, según los analistas, “no han sido alentadores”.
El traspié de Caputo y la licitación de emergencia
El miércoles, el Ministerio de Economía buscó limitar el acceso de inversores a las dos Lecaps más cortas para forzar una baja en las tasas. Sin embargo, la jugada salió mal: solo se renovó el 61% y las tasas en el tramo más corto treparon al 70% anual.
Con el agua al cuello, Caputo tuvo que anunciar una colocación de urgencia para el lunes 18 de agosto, con la intención de absorber pesos y reducir la presión cambiaria.
Factores externos que agravaron la crisis
A la incertidumbre local se sumó el mal dato de inflación mayorista en Estados Unidos: 3,3% interanual, casi un punto por encima de lo esperado (2,5%). El dato mensual también sorprendió: 0,9% frente al 0,2% proyectado, después de un junio sin cambios.
Según el economista Jorge Neyro, este panorama golpeó a Wall Street y contagió a los mercados emergentes, agravando la caída en Buenos Aires.
El nerviosismo electoral y el rumbo errático
Para el también economista Eric Paniagua, la combinación es explosiva:
“Los balances bancarios no han sido alentadores y se suma el nerviosismo por las elecciones, además de los cambios imprevistos de rumbo en la política de tasas del equipo económico”, advirtió.
El resultado: una plaza financiera sacudida, inversores a la defensiva y un mercado que ya descuenta más volatilidad de cara a las elecciones.
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