El director deportivo de Alpine, Flavio Briatore, lanzó una frase que encendió todas las alarmas en torno al futuro de Franco Colapinto en la Fórmula 1. Tras el noveno puesto del piloto argentino en la última práctica del Gran Premio de Países Bajos, el italiano dejó en claro que su continuidad en la máxima categoría no está asegurada.
Por Ignacio Elfratini para Noticias La Insuperable
“No es lo que espero”, sentenció Briatore, dejando entrever que podría ser el comienzo del final de la aventura del joven bonaerense en la F1.
El peso de la presión
Durante la entrevista concedida a la señal oficial de la categoría, el histórico dirigente italiano trazó un paralelismo con Kimi Antonelli, joven promesa de Mercedes:
“Quizás Colapinto tiene el mismo problema que Kimi, tiene demasiada presión. Hay que tenerlo en cuenta, son seres humanos y son chicos”, afirmó Briatore.
La comparación puso sobre la mesa el desafío de los rookies en la Fórmula 1 actual: coches más pesados, más rápidos y con un nivel de exigencia que muchas veces tritura talentos antes de que logren asentarse.
El futuro en duda
Cuando se le preguntó directamente qué necesitaba ver en Colapinto para confirmar un asiento en 2026, Briatore sorprendió con una respuesta tajante:
“Creo que ya lo he visto todo. No necesito ver nada más. Es difícil. Para este piloto, es muy difícil lidiar con este coche. Quizá no era el momento adecuado para que Franco estuviera en la Fórmula 1”.
Sus palabras sacudieron a los fanáticos argentinos, que esperaban una señal de respaldo hacia el joven de Pilar.
“Quizá necesite uno o dos años más”
Lejos de suavizar su postura, el italiano redobló la apuesta:
“Quizá necesite uno o dos años más para formar parte de la Fórmula 1. Y sé que, al final, lo importante es el resultado. Cada piloto se esfuerza mucho con los ingenieros para complacerlo en todo, pero no es lo que espero de Colapinto”.
Con esta definición, Briatore dejó abierta la puerta a una posible salida de Franco Colapinto del gran circo automovilístico, justo en el momento en que el argentino comenzaba a ganarse el respeto del paddock.
Un golpe al entusiasmo argentino
En Argentina, la figura de Colapinto se convirtió en símbolo de esperanza: el piloto que podía devolver al país al mapa grande de la Fórmula 1, después de décadas de ausencia. Sus primeros pasos con Alpine habían sido celebrados como un logro histórico.
Sin embargo, las declaraciones de Briatore marcan un quiebre. Más allá de los resultados en pista, el futuro del joven talento dependerá de decisiones corporativas que poco tienen que ver con el sacrificio mostrado hasta ahora.
¿Final anticipado o desafío renovado?
En un deporte donde la política pesa tanto como la velocidad, la frase “no es lo que espero” podría sellar la suerte de Franco Colapinto. O, quizás, convertirse en el disparador para una revancha que vuelva a poner al argentino en la pelea.
Por ahora, lo único seguro es que el camino no será sencillo.
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