Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como “Pequeño J”, fue detenido en Perú y está acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Brenda, Morena y Lara. La captura se concretó tras un operativo conjunto entre la Policía de la Provincia de Buenos Aires y las fuerzas de seguridad peruanas.
Por Ignacio Álvarez Alcorta para Noticias La Insuperable
Una detención clave en la causa
El horror del triple femicidio de Florencio Varela comienza a mostrar nuevas piezas en el rompecabezas. En las últimas horas, las autoridades confirmaron la detención de Tony Janzen Valverde Victoriano, más conocido en el mundo del narcotráfico como “Pequeño J”.
El joven, de apenas 20 años, fue atrapado en territorio peruano y ya enfrenta una acusación gravísima: ser el autor intelectual del asesinato de Brenda, Morena y Lara, tres jóvenes que fueron brutalmente ejecutadas en un hecho que conmocionó al país.
Un operativo internacional
La captura de “Pequeño J” no fue casualidad. Se logró gracias a un trabajo conjunto entre la Policía de la Provincia de Buenos Aires, las fuerzas de seguridad de Perú y la colaboración de Interpol, que venía siguiendo de cerca los pasos del sospechoso, que parecen poder entrar y salir del país sin que existan controles.
Fuentes judiciales confirmaron que el detenido será sometido a un proceso de extradición para poder comparecer ante la Justicia argentina y responder por los cargos que pesan en su contra.
La sombra del narcotráfico
El caso vuelve a poner sobre la mesa el vínculo entre el narcotráfico y los femicidios, una trama que el Gobierno de Milei parece no querer mirar. Mientras el ajuste arrasa con las políticas de seguridad y prevención, los barrios populares se ven cada vez más atravesados por las disputas del narcomenudeo.
Lejos de la propaganda oficial, el avance de bandas como la que lideraba “Pequeño J” demuestra que las mafias encuentran terreno fértil en un Estado que desmantela programas sociales y recorta recursos en seguridad e inteligencia criminal.
Justicia por Brenda, Morena y Lara
El triple crimen de Florencio Varela no solo destapó el accionar de una organización narco que operaba con total impunidad, sino que también puso en evidencia la vulnerabilidad de las mujeres en un contexto de violencia extrema.
Las familias de Brenda, Morena y Lara siguen reclamando justicia. La detención de “Pequeño J” representa un paso importante, pero la investigación continúa y todavía resta determinar las responsabilidades de quienes ejecutaron materialmente los asesinatos.
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