La situación del único detenido, el empresario Francisco Sáenz Valiente, se complica aún más.
La muerte de Emmily Rodrigues, la joven de 26 años que cayó de un sexto piso de un edificio ubicado en Retiro el pasado 30 de marzo, dejó como único detenido al empresario Francisco Sáenz Valiente, dueño de la vivienda. A pesar de que desde el inicio todo fue un misterio, en las últimas horas, hubo un giro inesperado en la causa.
Según informó la agencia Télam, una lesión en la zona derecha del pecho y el abdomen descrita con el número 18 en la autopsia de la modelo brasileña podría probar que la víctima ofreció resistencia y fue empujada desde la ventana del departamento del empresario detenido por el caso.
“La lesión 18 de la autopsia podría ser la clave de la causa y la que pruebe que fue un crimen”, aseguró al mismo medio el abogado Ignacio Trimarco, quien representa a los padres de Rodrigues, quien en 2018 llegó a Argentina para estudiar medicina, pero trabajaba de modelo y hacía cursos de estética.
Según las conclusiones de los forenses, el deceso fue producido por “politraumatismos” y “hemorragias internas y externas”. Además, indicaron, que una caída desde un sexto piso, como en este caso -de menos de 50 metros-, en medicina legal se conoce como “defenestraciones”.
“Ello ha ocasionado un sinnúmero de lesiones previamente descriptas que producen tanto una hemorragia intraabdominal por estallido hepático, una fractura grave de cadera y miembro inferior derecho y una fractura de la primera vértebra cervical, las cuales son idóneas para producir la muerte”, explicó el médico legista Héctor Di Salvo.
Son 29 las lesiones que en total describe el forense, pero el abogado Trimarco puso el foco en la número 18 que dice: “Área escoriativa y apergaminada de 13 por 9 centímetros, con patrón de arrastre en tórax y abdomen derecho a la altura del hipocondrio derecho”.
“El borde inferior de la ventana por donde cae Emmily está a 90 centímetros del piso, es decir, a la misma altura del pecho. Ese raspón, esa lesión de arrastre, es indicativa de que ella se estaba resistiendo, apoyándose contra la ventana, y termina siendo empujada. Si querés tirarte, pegás un salto y te tirás de cabeza”, opinó Trimarco.
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